Rayos láser enviados desde el Observatorio de Paranal (Fuente externa)

El disparo que se observa en la fotografía, enviado hacia las estrellas es real y es enviado desde la Tierra. No es una imagen de Stars Wars ni de ninguna película o serie de ciencia ficción.

Los disparos de rayos láser son responsabilidad del Observatorio Europeo del Sur (ESO), administrado por la Agencia Espacial Europea, desde el cual hace años un grupo de astrónomos observan la Nebulosa Carina o Eta Carina, que es una muy luminosa estrella supergigante, cuyas estimaciones de masa oscilan entre 100 y 150 veces la masa del Sol y su luminosidad es cuatro veces mayor a la de nuestra estrella.

Esa formación estelar ubicada aproximadamente a 7.500 años luz de la Tierra, es la estrella más masiva que se puede estudiar con gran detalle, debido a su ubicación y tamaño y sobre todo porque se cuentan con datos sobre ella mucho más robustos que de otras estrellas supergigantes.

Partes del Very Large Telescope (Fuente externa)

Desde hace varias décadas, esta nebulosa ha sido un objeto de visualización constante por parte de grandes astrónomos que aprovechan las ventajas del poderoso telescopio terrestre Very Large Telescope (VLT) del Observatorio Europeo del Sur (ESO), en Chile. Según muestra la fotografía parece tratarse de el Observatorio Paranal, ubicado en la comuna de Taltal, en la Región de Antofagasta, exactamente se encuentra sobre el Cerro Paranal en el desierto de Atacama, perteneciente a la cordillera de la Costa, a 2635,43 metros sobre el nivel del mar, a 130 km al sur de Antofagasta y a 12 km de la costa.

En esta imagen difundida por los astrónomos, la nebulosa aparece como una impresionante nube rosa en el cielo despejado sobre el Observatorio. La Nebulosa Carina es una vasta nube de polvo y gas; este gas es ionizado y hecho brillar por las estrellas dentro de la propia nebulosa.

Según los informes, la moderna instalación de óptica adaptativa instalada en uno de los telescopios unitarios (UT) de 8,2 metros del VLT está en pleno funcionamiento, enviando los rayos láser de color naranja desde los UT a la atmósfera donde alteran las partículas de sodio y las hacen brillar. Esto crea ‘estrellas’ artificiales que se usan para medir los efectos borrosos causados por la atmósfera de la Tierra, que luego son corregidos por el telescopio.

Una imagen del VLT (Very Large Telescope) de ESO (European Organisation for Astronomical Research in the Southern Hemisphere) en Paranal, Chile (Fuente externa)

“Eta Carinae es en realidad un par de dos estrellas gigantes, que han estado explotando constantemente en una espectacular erupción de gas y polvo durante casi 200 años y ahora le estamos disparando láseres”, afirman los astrónomos responsables del ingenioso truco astronómico para mirar a través del tiempo y el espacio.

Una técnica para mejorar la observación

Ver tan lejos en el espacio puede ser complicado, incluso cuando se observa uno de los objetos más brillantes de nuestra galaxia a través de uno de los telescopios más poderosos de la Tierra ya que siempre hay un problema común muy molesto: la atmósfera gaseosa de la Tierra siempre se interpone en el camino, difuminando y distorsionando la vista de los objetos celestes.

Es ahí donde entran los lásers. Según el ESO, los científicos disparan estos lásers desde una de las piezas que componen el Very Large Telescope para simular estrellas distantes. Las partículas de sodio en la atmósfera hacen que los rayos brillen de color naranja. Luego, los astrónomos se enfocan en estas estrellas artificiales para medir en qué cantidad estos rayos son borrosos por la atmósfera de la Tierra. Al practicar con estrellas falsas, los astrónomos pueden calibrar más eficazmente el telescopio para corregir el desenfoque atmosférico al mirar estrellas reales, galaxias y objetos explosivos como Eta Carinae.

Realmente lo que hacen los científicos de la Tierra es disparar láseres al corazón de un sistema estelar en explosión, pero solo para que puedan conocerlo mejor.

Esperamos tu comentario

Deja un comentario