Jaie Laplante nació y creció en Alberta (Canadá) y se enganchó al cine a una edad temprana. Empezó leyendo las críticas de Pauline Kael y a los 14 años tuvo la «desfachatez» de llamar al periódico local y quejarse a gritos del crítico de cine, con lo que le concedieron el puesto por teléfono. Como ya tenía una voz profunda, no se dieron cuenta de que sólo tenía 14 años.

En la actualidad, Laplante, licenciado en Bellas Artes por la Universidad de York con especialización en producción cinematográfica, es el director ejecutivo del Festival Internacional de Cine de Miami que abre las puertas de su 39 edición el próximo 4 de marzo para mostrar el trabajo de los mejores cineastas emergentes y establecidos del mundo a la diversa comunidad cosmopolita de Miami. Además, se otorgan premios en metálico por un total de más de 100.000 dólares en las categorías de competición.

En los últimos años, el Festival de Cine de Miami ha atraído a unas 45.000 personas al año, así como a 300 cineastas, productores, talentos y profesionales de la industria de todo el mundo. Incluso durante la pandemia, el festival fue capaz de presentar, en un formato híbrido y seguro (tanto virtual como en sala conforme a la normativa COVID) más de 100 largometrajes, documentales y cortometrajes de todos los géneros, procedentes de 40 países diferentes.

En esta entrevista, concedida a la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA por sus siglas en español), Laplante habló de las novedades que ofrecerá el festival hasta el próximo 13 de marzo y su visión para las próximas entregas.

¿Cuáles son las novedades que podrá disfrutar el público este año?

El Festival de Cine de Miami está ampliando este año su apoyo a los cineastas de forma más directa, centrándonos en la producción. En colaboración con Oolite Arts, estamos concediendo 120.000 dólares en efectivo en comisiones a ocho cineastas originarios de Miami para que creen cortometrajes sobre el tema de la familia que proyectaremos el próximo año con motivo de nuestro 40 aniversario. Con el apoyo de la Fundación John S. y James L. Knight, estamos trabajando con IF/Then Shorts para conceder subvenciones de desarrollo a otros ocho cineastas del sur de Florida en el marco de un programa que denominamos ‘Heroes Knight’.

Hemos ampliado nuestro equipo de programación para crear una mayor diversidad y complejidad entre quienes se encargan de la selección. Como novedad, este año presentamos la sección ‘Quinteto Dominicano’ formada por cinco películas de la República Dominicana. Creemos que el cine de ese país está experimentando un interesante avance, un nuevo nivel de madurez creativa que hemos visto evolucionar constantemente durante la última década.

¿En qué se diferencia el Festival Internacional de Cine de Miami de otros festivales de cine de todo el mundo y/o de otras grandes ciudades de Norteamérica?

Miami es un lugar interesante. Es increíblemente internacional y cosmopolita, pero no es un crisol de culturas. Aquí hay mucha libertad para ser quien quieras ser y hacer lo que quieras hacer, y para algunas personas eso significa ser tremendamente expansivo en cuanto a sus gustos culturales, y para otras, significa mantenerse firmemente dentro de las tradiciones de su entorno cultural específico. Así que programar para una población tan variada es divertido y desafiante a la vez.

Si comparas la programación del Festival de Cine de Miami con la de otras ciudades norteamericanas o mundiales, puede parecer inusualmente ecléctica, pero para los de Miami tiene mucho sentido.

¿Qué busca el Festival a la hora de decidir qué películas se incluyen en la selección oficial?

Buscamos películas que conecten con lo que ocurre en la vida y la imaginación de la gente de Miami. Queremos películas que entretengan y provoquen. Buscamos historias en las que la gente de Miami pueda reconocerse en la pantalla y también reconocer la humanidad que comparten con personas que viven historias en países y comunidades que están muy lejos de las realidades de nuestros hogares.

¿Qué consejo ofrecería a cineastas hispanos emergentes?

Que se interesen por las películas que han hecho las generaciones hispanas anteriores a la suya. Y que se pregunten dónde podrían haber empujado esas películas si las hubieran hecho ellos.

Después, que hagan su película sin imitar nada de lo que han visto antes. Gran parte de la razón por la que las películas de nuestra sección ‘Quinteto Dominicano’ son tan potentes este año es porque estos cineastas no se han limitado a la hora de criticar duramente a su propia sociedad, lo que supone un avance nuevo, maduro y refrescante.

Ahora, más que nunca, la gente ve las películas a través de la ortodoxia tradicional de ser consumido por una experiencia más grande que ellos mismos, que es lo que el cine hace en sus mejores momentos.

¿Qué películas recomienda a los espectadores ahora que el festival también se puede seguir en la red?

No todas las películas de nuestra selección oficial estarán disponibles en red, pero sí un gran número de ellas. La guerra civil, dirigida por Eva Longoria, es una película con la que cualquier estadounidense de primera generación se sentirá identificado: describe las luchas emocionales del gran Óscar de la Hoya, quien creció en un hogar mexicano en la ciudad de Los Ángeles, donde no era lo suficientemente mexicano para los mexicanos, y no era lo suficientemente estadounidense para los estadounidenses.

Estación catorce, de Diana Cardozo, examina la violencia a través de un enfoque muy impactante. En 2022 podemos sentir la violencia a nuestro alrededor y sin embargo no queremos verla delante de nosotros. Esta película afronta esa tensión de manera que nos hace replantear nuestra actitud hacia ella.

Películas como The Lost children of Jarabacoa (Dossier de ausencias) o Una película sobre parejas pueden poner en el punto de mira nuestras propias esperanzas o decepciones frustradas de una manera que puede hacernos sentir expuestos, aunque, en este último caso, sea a través del filo simultáneamente tranquilizador de la comedia.

(Tomado de la página de The Golden Globes)

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