El músico y compositor cubano Miguel Faílde (1852-1921) dejó para la posteridad un género musical que cruzó las fronteras y que tiene en Yucatán uno de los nidos más generosos de su desarrollo internacional: el danzón. México asumió el género como si Matanzas o Las Tunas quedaran en suelo mexicano. Y si hoy en Cuba pocos bailan este maravilloso género en Yucatán sigue vivísimo.

Justamente de un mexicano, Arturo Márquez, es la obra Danzón No. 2. que otra mexicana, la pianista Alondra de la Parra ha querido producir con lo que ha llamado La Orquesta Imposible.

Alondra de la Parra, pianista y directora de la Orquesta Imposible

Armar esta orquesta en tiempos normales cuesta una fortuna y mover tantas personalidades desde distintas ciudades hasta una, sería un complicado asunto de producción. Algo imposible. O casi imposible. Se trata de una idea de la gran pianista mexicana quien reunió virtualmente con 30 de los mejores músicos del mundo, cada uno en su lugar de origen, en medio de la pandemia y a beneficio de buenas causas. Claro que no solo fue música, también danza, con la coreografía de Christopher Weeldon, bailado por la mexicana Elisa Carrillo, prima ballerina del Staatsballett de Berlín.

Elisa Carrillo, destacada bailarina mexicana

En la orquesta participan el oboista Albrecht Mayer (Alemania) de la Orquesta Filarmónica de Berlín, de esa misma agrupación en la tuba Alexander Von Puttmaker (Alemania); en el violín, el también compositor, director de orquesta, presentador, escritor, actor y director de cine Alexéi Igudesman (Rusia); en el violonchelo la norteamericana Alisa Weilerstein; el violín principal de la Filarmónica de Berlín Amihai Grosz (Israel); el multipremiado trompetista cubano-americano Arturo Sandoval, en el timpani el percusionista Benjamin Forster, principal de la Orquesta Filarmónica de Berlín; en las pailas el multipercusionista Christoph Sietzen nacido en Luxemburgo y ciudadano de Austria; la española Cristina Gómez, oboista seleccionada por Daniel Baremboin para la Orquesta Estatal de Berlín.

Paquito D’Rivera en el saxo tenor

El contrabajista Edicson Ruiz (Venezuela), de la Orquesta Filarmónica de Berlín también forma parte de la Orquesta Imposible, así como el flautista franco-suizo de la misma agrupación berlinesa Emmanuel Pahud; en el corno, el excepcional músico minusválido Félix Klieser (Alemania), quien toca el instrumento con los dedos del pie izquierdo. Asimismo la flautista Gili Schwarzman (Israel) quien ha sido solista en muchas orquestas incluyendo la Filarmónica de Berlín y la Sinfónica de Jerusalem; igualmente de la Filarmónica de Berlín es el violinista Guy Braunstein (Israel); otro violonchelista participante en el proyecto es Jan Vogler (Alemania) radicado en Nueva York, solista que ha tocado con las más exigentes orquestas del mundo. Con ellos también los tombonistas Jorgen van Rijen (Países Bajos), de la Royal Concertgebouw Orchestra de Amsterdam y el solista de la Filarmónica de Nueva York Joseph Alessi (Estados Unidos); el reconocido violinista ruso Maxim Vengérov, solista de numerosas orquestas de renombre mundial; el destacado violinista serbio radicado en Francia Nemanja Radulovic; el laureado trompetista Pacho Flores (Venezuela) ganador del más importante premio de trompeta en el mundo (Primer Premio del Concurso Internacional “Maurice André”); el gran saxofonista y clarinetista cubano Paquito D’Rivera, una leyenda del jazz; el también violonchelista mexicano Rolando Fernández Lara, ganador en el 2017 del 2do premio Rubinstein en su instrumento; aparece igualmente, tocando las claves, el reconocido tenor mexicano radicado en Francia Rolando Villazón; también de la Orquesta Filarmónica de Berlín, en el corno, la trompista Sarah Willis (Gran Bretaña) quien a inicios de este aciago año desarrolló en La Habana un proyecto titulado Mozar y Mambo.

Varios de los destacados instrumentistas

La Orquesta Imposible también la componen el trompista Stefan Dhor (Alemania) de la Filarmónica de Berlín; de esa misma agrupación es el trombonista Stefan Schulz (Alemania), el fagot principal de esa misma orquesta desde 1985 es Stefan Schweigert y participa en el proyecto liderado por Alondra de la Parra, quien sumó al cubano Yuniet Lombida Prieto, quien es un destacado saxofonista joven, a pesar de que las cuotas del instrumento ya estaban cubiertas, así que Lombida asumió algo que es muy cubano como el danzón, el güiro.

Yuniet Lombida en la güira

Todo el dinero recaudado por este mágico proyecto será a beneficio de Fondo Semillas y Save the Children México.

La directora de orquesta y pianista Alondra de la Parra es fundadora y directora artística de la Orquesta Filarmónica de las Américas con sede en Nueva York, y es directora musical de la Orquesta Sinfónica de Queensland en Australia, convirtiéndose en la primera mujer en desempeñar ese cargo en una orquesta australiana.

El video fue lanzado hace apenas cuatro días, el pasado 25 de agosto.

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