Desde luego que es hermoso y es un derecho, el coleccionar pinturas de valor por ser piezas únicas, de la firma de reconocidos artistas, pero cuando se esta frente a un mural en una calle o avenida, a la vista de todo el que pase, la obra artística tiene un papel social insustituible y esencial.

Ese valor del mural, se incrementa cuando quien lo realiza tiene el dominio de la técnica, su base formativa es el dibujo, su gerencia de la pintura, en tanto expresión cromática, de acuerdo al juicio de una muralista solitaria: Lidisset Reyes Banks, quien ha trabajado por más de diez años en provincias y la capital, llenando de murales paredes que estaban antes vacías de imágenes.

Ha tenido que enfrentar de todo. La gente no esta acostumbrada a que una mujer joven, artista y sola, llegue a los lugares a pintar un mural para el disfrute de todos. Es una ruta no sencilla de encaminar.

Reyes Banks considera que el mural es una obra pública de arte que demanda perfección en el dominio de la técnica, criterio para seleccionar sus temas, que demanda un sacrificio personal de trabajo bajo el sol y que conlleva un vigoroso compromiso de educar y sensibilizar a la gente de la calle, de cara al valor del arte como espejo de la vida.

Reyes Banks, que tiene más de diez años pintando murales tanto comunitarios, de servicio público y en espacios privados comerciales, entiende que pocas artes son tan democráticas como el mural porque se sitúan en la vía por la cual transitan diariamente centenares de personas, a las que les impacta el signo estético que tienen delante.

“El mural tiene una fuerza que viene dada por su perfil democrático, tiene un papel de fortalecer el gusto por el arte visual, logra no pocas veces, ser expresión de la cultura local y comunitaria, se resuelve en homenajes permanentes a quienes han hecho aportes considerables a la felicidad y vida de sus conciudadanos” dice Lidisset Reyes Banks, al comentar su inclinación por esta expresión.

Una loba solitaria

Ella se considera como una creativa loba solitaria que ha desarrollado una trayectoria amplia de imágenes, figuras y símbolos en pueblo y ciudades, valorando a los personales locales y nacional, con murales en Santo Domingo, Puerto Plata, Cabrera, Sosúa, Cabarete, Baní, La Romana y otros puntos de la geografía nacional.

“La gente se siente extraña cuando llega esta mujer joven, cargada de pinceles, pinturas y una escalera para instalarse frente a una pared en blanco, que queda luego como obra de arte para todos y todas” dice Reyes Banks.

Sostuvo que son muchas las personas que, pasando por las calles de Villa Mella, se han enterado de la existencia y la obra interpretativa en lo musical, de la cantante de son Sonia Cabral, una negra que es mito viviente y que es reconocida en la zona como tal y otro al cantante y músico de son Juancitón.

La muralista indica que la pintura en cuadros es muy importante porque conforma el patrimonio cultural visual de los pueblos, pero que el mural tiene una función mucho más social, porque se ofrece en imágenes que se ven libremente, al recorrer las vías públicas.

La artista destaca la importancia de los muralistas que desarrollan proyectos como el de Transitando, que ha muralizado espacios en provincias y ciudades desde hace años y que actualmente desarrolla la Ruta de los Murales en Ciudad Nueva Santo Domingo.

Lidisset Reyes Banks trabajando en su mural El Beso, en La Romana. TODAS LAS FOTOS SUMINISTRADAS A NOTA CLAVE.

Sostiene que, en muchas oportunidades, ha creado murales que se transforman en parte de la vida social y son un referente turístico y de toma de fotos por parte de lugareños y visitantes, como ocurrió con el mural El Beso, en La Romana, al que acuden enamorados para tomarse fotos con la imagen de foto, besándose ellos mismos, además.

Mural, más que dibujo

Para la artista, el mural es una creación que demanda dominio de pintura y el dibujo, además de criterio para elaborar un concepto, sentido para determinar su orientación con relación al espacio y al entorno.

Al indicar cuales artistas del mural la han influido, Lidi (como la llaman familiarmente) dice que sus referentes son: Killia Llano, Jade Rivera, Pedro Veras, y Medio peso.          

Considera que el Estado, y el Ministerio de Cultura deben incentivar la formación de muralistas en cada pueblo, de forma que se garantice la permanencia de esta expresión artística y la generación de relevo.

Considera que la belleza y el mensaje del mural no solo decora espacios, sino que transforma el pensamiento, la autopercepción de la gente al verse reflejada en las dimensiones gigantes del mural, cuando se pinta gente común.

Mensaje a muralistas

Al dirigirse a sus colegas muralistas, Lidisset les pide que sigan desarrollando su labor con valentía y arrojo, con dominio profesional del quehacer, les solicita estudiar siempre las tendencias y expresiones de esta expresión artística.

“El mural no solo debe ser bonito, colorido y equilibrado en su composición. Debe comunicar con fuerza y poder e impacto estético y ternura y admiración. Crean en su potencial y talento. No dejen de creer en ustedes, porque Dios está en cada uno” afirma finalmente.

La joven artista del mural tiene sus contactos en redes sociales @muralart_bylidi

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