(Todas las fotos son de Alfonso Quiñones)

Teniendo en cuenta que Sinergia (ese es el nombre del nuevo show de Miriam Hernández), es la acción conjunta de varios órganos en la realización de una función, ya nos damos cuenta por dónde andan las cosas.

Este viernes fue el primero de los dos conciertos de la cantante chilena en el Teatro Nacional por quien, tal parece que el tiempo no pasa. Este sábado comenzará a las 8:30 en punto, como el viernes. Hay boletas disponibles.

El viernes arrancó con «Hasta aquí». Imagenes de dunas y aires árabes y Miriam dando cadera y una pierna desnuda desde la base de la ingle al tobillo. «Detras de ti ya se me va la vida», dice en Quién cuidará de mí.

La banda está compuesta por tres mujeres: una guitarra tradicional que además hace coros, otra en teclados también corista y otra en percusión menor; y cinco hombres: piano, bajo, guitarra rïtmica, guitarra prima y batería.

El hombre que yo amo, y ahora sí coro del público. Y Miriam cantando en el mismo tono de siempre y la guitarra prima llorando. Al final del tema, luz cenital. 8.51 y la gente llegando al teatro e interrumpiendo a las demás personas que llegaron a tiempo. No te he robado nada, cantaba la artista chilena.

Sinergia. 8.55 el publico sigue llegando e interrumpiendo. El tema es nuevo y da título a la gira que realiza. Breves aplausos al final del tema. Enseguida guitarra española y canta Encadenada. La rubia joven de la percusión menor coge el cajón. 9:01 siguen llegando personas interrumpiendo el desarrollo del espectáculo. Aqui mas aplausos y saluda al país «que amo sinceramente con un apoyo incondicional hace poco subi un video donde decía quisiera vivir allá. Y agradeció y le dio la bienvenida a los que fueron a ver Sinergia.

«Porque la fuerza del amor es grande», explica en La fuerza del amor. «La fuerza del amor somos tú y yo». Dan las 9:05 y aún siguen llegando personas.

Impresiona la calidad del diseño de imágenes para las pantallas led. Su riqueza. Especialmente diseñadas para esta gira de Miriam, que comenzó su carrera a fines de los años 80.

Ahora la mayoría de los músicos bajan de sus sitios a proscenio. «Porque el amor vence todo» expresa en «La Fuerza del amor». Es cuando salen todos de la escena y quedan solo Miriam y el pianista. «Eres un rayo de luz del paraiso y quiero detenerte aqui conmigo», manifiesta en «Paraiso»…

Hay gente no acostumbrada a los teatros que llega tarde, a las 10:00 de la noche al Teatro Nacional y exigen entrar. Creen que el espectáculo tiene que esperar por ellos. Hay que terminar con eso. Hora de inicio es hora de inicio.

Miriam Hernández mantiene su voz firme, radicalizada en las notas altas, y cuando está allá arriba, aparece el vibrato. «Eres un rayo de luz del paraiso» vuelve ahora a capella provocando una ovación. Luego canta a duo con el guitarrista. Todo en tu vida, Mañana, Ya es tarde.

Interactúa con el público y derrama su simpatía. Se me fue, Tonto, Ay amor, Un hombre secreto. En la recta final interpreta Te pareces tanto a él, otro de sus éxitos de siempre, provocando la algarabía y los aplausos.

Huele a peligro, Herida, Te quiero mi amor, ya las tres que significan el falso final.

Miriam contrajo matrimonio a los 27 años de edad con su mánager y empresario chileno Jorge Saint-Jean el 15 de agosto de 1992. Aún sigue juntos. Y cuando ella sale de escena es él quien la recibe. Tras bambalinas una asistente le echa aire con un abanico y toma un poco de agua.

De vuelta cantó y lanzó flores blancas (¿gladiolos?) al público. «El último adiós». Final en firme. A estas alturas, la percusionista rubia hizo galas de africanía, con una motivadora descarga con todos los hierros.

Cuando todo termina, Jorge toma a Miriam de la mano y la lleva hasta la yipeta que espera por ella. Mañana será otro día de Sinergia. Ahora va por ahí llena de adrenalina. Llueve en Santo Domingo.

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