El principito, de Saint Exupery, es una experiencia única, un libro que no puede faltar en el desarrollo psicológico de un niño (Fuente externa)

El pasado viernes 10 de septiembre recordaba en El Show del Mediodía los datos que arrojan que los niños de 10 años no saben leer o comprender la lectura. Y decía que esto no quiere decir que no sean inteligentes o no tengan abiertas las entendederas. Porque estoy casi seguro que casi la totalidad de ellos se saben el casi 100% de los dembow de moda, y comprenden muy bien el significado de las palabras, sobre todo del argot que usan para que las personas mayores seamos realmente los que no comprendamos una papa de lo que ellos hablan.

El reto es grande. Da miedo. Pero si bien hay muchos que nunca han visitado una biblioteca o una librería, puede que algún vecino, o vecina, con mejor preparación que sus padres, o algún profesor, pueda recomendarles entrar a un sitio que he descubierto y es un oasis de cultura, de buen gusto, de esa frescura esencial que nos remonta a los primeros años, y como no, también a la adolescencia. Me refiero a https://pruebat.org/

Se trata de una Biblioteca puesta a disposición de todos, gratuitamente por la Fundación Carlos Slim, y que Claro Dominicana sugiere. La biblioteca contiene algunos de los libros más importantes escritos por autores de reconocimiento mundial.

La biblioteca está organizada en libros de la Literatura Universal, Literatura de Hispanoamérica, Historia y Novela histórica, Ensayo, Literatura Infantil y Juvenil y Libros de Autoayuda.

La biblioteca permite que bajes el libro en PDF y lo atesores en tu ordenador para siempre.

En el catálogo de libros Infantiles y Juveniles está por supuesto El Principito, de Saint Exupery, el aviador que se estrelló durante la Primera Guerra Mundial en las aguas frente a Niza, Cannes, Marsella. Este es el libro que yo recomendaría para comenzar a convertirse en lector. Luego recomendaría otro que lamentablemente no está, que es Corazón, de Edmundo de Amicis. Pero sí están en estos anaqueles virtuales las entretenidas Fábulas de Samaniego; Alicia en el país de las maravillas, de Lewis Carroll; una estupenda Selección de Cuentos de los hermanos Grimm; y la inolvidable aventura de la ballena Moby Dick, de Herman Melville, cuyas imágenes perdurarán para toda la vida. Peter Pan y Wendy, de James Mathew Barry desarrolla tanto la fantasía y las capacidades para crear, como El flautista de Hamelín, de los hermanos Grimm.

Algunos de los libros incluidos para el público infantil y juvenil (Captura de pantalla)

Probablemente este sea el «estante» más importante en cuanto a la formación de valores desde las pequeñas edades, y la adolescencia, porque leer Las veinte mil leguas de viaje submarino y Viaje al centro de la Tierra; ambas de Julio Verne, significan aprender a viajar más allá de las cuatro paredes de una habitación. No se pueden quedar fuera títulos como Oliver Twist, de Dickens; Los viajes de Gulliver, de Swift; las Leyendas de Gustavo Bécquer, o La llamada de la selva, de Jack London. Muchas de estas obras han sido llevadas a cine, pero ninguna de sus puestas en pantalla supera la intensa experiencia de la lectura.

Peter Pan ha sido llevada al cine desde tiempos tempranos de la industria cinematográfica (Fuente externa)

Títulos como La metamorfosis de Kafka, la Odisea de Homero, Crimen y Castigo de Dostoyevski, Edipo rey, de Sófocles, hasta El profeta de Khalil Gibrán, El retrato de Dorian Grey de Oscar Wilde, Fuenteovejuna de Lope de Vega y La Divina Comedia, de Dante Alighieri, por solo citar unos pocos de 92 obras imprescindibles de la Literatura Universal.

Cuenta con una colección de Literatura Latinoamérica con 56 obras, entre las que se destaca el Popol Vuh, un libro esencial para comprender los orígenes de los pueblos que vivían en el continente; así mismo El Cantar del Mío Cid. Están las Tradiciones peruanas de Ricardo Palma; La vida es sueño, de Calderón de la Barca; Poesía de Juana Inés De la Cruz; Niebla, de Miguel de Unamuno; Nuestra América, de José Martí; El Martín Fierro, las décimas de José Hernández, y otros títulos que conforman un anaquel de lo mejor de nuestras letras en castellano.

«La vuelta del malón», (1892) óleo del argentino Ángel Della Valle, ha servido para ilustrar el enfrentamiento entre civilización y barbarie que describe Sarmiento en su «Facundo»

Recomendable para los que desean conocer de donde venimos, la colección de Historia y Novela Histórica, y de ella Los Nueve Libros de la Historia, de Heródoto, ese que narra en nueve partes, cada una con el nombre de una Musa, aspectos de la guerra entre griegos y bárbaros, así como las llamadas Guerras Médicas que enfrentaron a Oriente y Occidente, entre otros. Incluye esta colección las Tradiciones peruanas de don Ricardo Palma; el imprescindible Facundo, de Juan Domingo Sarmiento; los Naufragios de Alvar Núñez de Vaca, que cuenta sobre los cuatro sobrevivientes de la expedición de Pánfilo de Narváez en Florida y los duros avatares de una vida de ocho años entre los nativos.

La colección dedicada a los Ensayos, está poblada de libros como La raza cósmica de José de Vasconcelos; el famoso Yo acuso, de Emile Zola; El origen de las especies de Charles Darwin. Y hay un libro de sumo interés: El arte de la guerra, de Sun Tzu, un libro con más de dos mil años de antigüedad y que es considerado el primero que aborda temas de estrategia militar. Como si fuera poco, del venezolano Andrés Bello, la Gramática castellana destinada al uso de los americanos. Del sabio alemán Alexander von Humboldt Cosmos: ensayo de una descripción física del mundo, con el cual intentó dejarnos una idea de todo el conocimiento de su época de manera condensada.

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