El delegado permanente de la República Dominicana ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) pronunció el discurso central del acto que dejaba inaugurada la cuarta edición de la Semana de América Latina y del Caribe.
“Este es un evento que nos permite celebrar nuestros orígenes latinoamericanos y caribeños, a la vez que damos a conocer la rica diversidad cultural que caracteriza a nuestros pueblos”, sostuvo el diplomático dominicano ante la UNESCO.
El representante ante la casa de la cultura universal ponderó que “se trata de un esfuerzo en favor de la sensibilización del resto del mundo sobre la urgente necesidad de preservar las lenguas y culturas autóctonas de las naciones indígenas, así como la importancia de éstas para un desarrollo sostenible auténticamente inclusivo y para la consolidación de la paz en el mundo”.
En ese sentido señaló que, “las lenguas indígenas juegan un papel primordial en los procesos culturales, sociales, económicos y políticos. Ellas representan un instrumento de integración, de comunicación y de educación, a la vez que fungen como vectores de múltiples manifestaciones vernáculas de nuestro ser cultural, constituyéndose así en una plataforma esencial de consolidación y preservación de nuestras identidades.
Destacó que, “las lenguas constituyen la fuente primaria y el medio fundamental para conocer los mundos que, a través de ellas y por ellas, adquieren los significados que así delimitan el horizonte conceptual de nuestras aspiraciones, de nuestros valores y del sentido que damos a la convivencia.
En consecuencia, resulta difícil imaginar una comunidad en ausencia de una lengua que funja como vehículo de comprensión, incentivando la convivencia pacífica y, allí donde fuera necesario, incluso la reconciliación. Por ello, la lengua es un derecho humano fundamental para la realización efectiva de la autonomía de los pueblos.
Rodríguez subrayó igualmente que, de conformidad con el mandato de la Asamblea General de la ONU, 2019 fue declarado Año Internacional de las Lenguas Indígenas y la UNESCO fue designada como organismo coordinador y ejecutor de las actividades e iniciativas encaminadas a llamar la atención sobre su potencial pérdida y la necesidad de conservar, revitalizar y fomentar las lenguas indígenas a nivel nacional e internacional.
Razón por la cual, el GRULAC ha dedicado esta cuarta edición de la Semana de América Latina y el Caribe al importante tema, aseverando que “la República Dominicana se une a esta celebración con la consciencia y el sentir claro de la importancia de invertirnos en este esfuerzo de preservación, entre otros motivos, debido a que nosotros perdimos esa invaluable herencia lingüística y, con ella, parte de nuestro ser, pues, la población autóctona fue exterminada, como resultado de ese violento proceso de aculturación que fue la colonización”.
Reafirmó el compromiso del país de apoyar a esta celebración, “que nos recuerda el escaso, pero valiosísimo legado de nuestros antepasados taínos: sus técnicas de cultivo; el consumo del casabe; sin olvidar la artesanía; y el ejemplo más claro que tenemos, el lenguaje”, concluyó el diplomático y cantautor dominicano.
Notas de las mejores agencias de noticias internacionales.