NC publica íntegro un texto enviado a los medios por el empresario Luis Medrano
Fotos servidas por el autor del texto
Al concluir el año 2019 el arte popular, las expresiones musicales auténticas de ésta patria de Duarte, Sánchez y Mella, el merengue, la bachata y la música típica sobrevivieron gracias al Sr. ministro de Turismo Francisco Javier García, la presidencia de la República en la persona del Sr. Presidente Danilo Medina Sánchez y el ministro administrativo de la Presidencia Rafael Peralta, el presidente de la Cámara de Diputados Radhamés Camacho y todos los diputados, los alcaldes de todo el país, a los senadores, regidores, algunos ministros, y los pequeños empresarios locales de los pueblos, del sector privado sin la Cervecería Nacional Dominicana, algunas estaciones de radio, canales de televisión y asociaciones de comunitarios ausentes de los pueblos las patronales, carnavales, festivales culturales, aniversario de las ciudades, festivales gastronómicos, la identidad nacional hubiera desaparecido.
La visión del ministro de Turismo Francisco Javier García de apoyar y darle seguimiento al turismo cultural y su renglón musical, han colocado en un privilegiado momento la bachata, merengue y los grupos de música típica, los que son muy preferidos, admirados y aplaudidos por los turistas de todo el mundo. Estos ritmos y sus intérpretes llaman mucho la atención de los turistas europeos, asiáticos, americanos, y latinoamericanos, que son impactados y tratan de cantarlo, bailarlo, tocar sus instrumentos y, claro, se fotografían y hacen videos que nos promueven en sus redes, grupos de familiares, de amigos y compañeros de trabajo. Hoy es una fuente muy importante de trabajo para la bachata y el merengue, entre otros ritmos y fusiones.
Es urgente que ésta generación de nuevos gerentes y presidentes de emporios empresariales, de grandes marcas de ron, cervezas, refrescos, whiskys, telefónicas y productos de consumo masivos tomen en cuenta y tengan conciencia del gran daño que hacen a la cultura musical nacional al ignoran, maltratar, renegar, golpear y subestimar a los buenos artistas de nuestras identidades nacionales folklóricas y musicales como el merengue, bachata y grupos típicos por sólo mencionar la parte muy popular y no entrar en la clásica que es mucho más maltratada.
Hoy tengo que quitarme la gorra de obrero, promotor, empresario artístico, gestor cultural y creador de trabajo y ponerme a escribir para llamar a la reflexión a los jóvenes y no tan jóvenes que manejan marcas y grandes presupuestos, porque un país sin cultura, sin folklore, no es patria. Que las empresas no sólo tienen responsabilidad social, también deben de devolver a sus grandes clientes y millones de consumidores incentivos y regalos y nada tan práctico como el de respaldar el talento artístico y musical de las diferentes expresiones musicales de la cual gustan todas las clases sociales que son sus clientes.
Cuando una marca, un producto o una empresa entra en contacto directo con sus clientes y consumidores a través de su identidad nacional que es la música popular, logra posicionamiento, solidez, ventas y clientes leales.
Es tiempo de despertar en esas empresas de todos los tipos de consumidores de las diferentes clases sociales y que son sus clientes masivos. El mundo cambió, pero ese cambio no se llevará la cultura, hará de la cultura su contenido y por ende la hará mas sólida.
En ésta tierra bendita donde caminamos bailando, hablamos cantando y saludamos sonriendo, como muestra de que somos como nuestras músicas que tienen valor y reconocimiento de patrimonio cultural mundial, porque todos aquí somos merengue y bachata, es el momento de mayor respaldo.
Aqui tenemos empresas entre 50 y 100 años y otras entre 20 y 50 años que venden miles de millones en el mercado local y si se le pidiera cuál es su aporte a la responsabilidad social y apoyo a la cultura la sorpresa sería de espanto, porque no tienen qué mostrar, son puro anti-dominicanos y los cupables de la promoción e incentivo de los modismos y cultura foráneas, en contra de la identidad nacional.
Los diputados, senadores, el Ministerio de Cultura y los grupos culturales y musicales tienen que someter un proyecto de ley, donde las empresas de productos de consumo masivo inviertan patrocinando y promocionando la base fundamental de ser nación que es la cultura en todas sus manifestaciones.
Reitero en nombre de la música nacional la gratitud al ministro de Turismo Francisco Javier García, al Presidente de la República Dominicana Danilo Medina Sánchez, al ministro de la presidencia Rafael Peralta, al presidente de la cámara de Diputados Radhamés Camacho, a todos los diputados, senadores, alcaldes, regidores, algunos ministros, en especial el gran esfuerzo de la Cerveza Presidente, que sin ese tan muy importante apoyo, hoy no tuviéramos identidad nacional.
#reflexionesletales de Luis Medrano 2020.
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