LG acaba de lanzar una mascarilla electrónica que elimina el 97,3% de los virus y el 93% de las bacterias.
Se trata de la PuriCare Air Purifier de LG.
Algunos que la han probado y valorado dicen ya que se convertirá en el artículo número uno del 2021.
La caja que la trae incluye a la propia mascarilla, un protector facial y estructura del protector facial, filtros PuriCare (2C/U), cubierta interior (10C/U), un extensor de tiras, el cable de carga (USB 2.0 a USB Tipo-C) y un bolsito portátil.
Para poder empezar a utilizarla, hay que montarla previamente. Un ‘montaje’ que quizás sea un poco complicado para ancianos, pero si se siguen al pie de la letra las instrucciones que vienen en la caja, no es mucho problema.
Al quitársela tendrás a su disposición una pequeña bolsa para guardarla, ya que no se dobla, como las de tela.
Del equipo solo hay que renovar los filtros Hepa H13 e interiores cada cierto tiempo.
Adicionalmente (esto no se expende dentro de la caja) se puede añadir un estuche de carga. Además de cargar la mascarilla, es capaz de esterilizarla con luz ultravioleta. Además, se podrá conectar a la app ThinQ de LG y avisará cuando detecte que haya que cambiar los filtros.
Este dispositivo puede parecer a priori un poco ‘armatoste’ por la rigidez de su exterior, pero nada más lejos de la realidad. La mascarilla electrónica no se dobla para guardarla en un bolsillo, pero es incluso más cómoda que una mascarilla tradicional debido a que la parte que roza con el rostro está hecha de silicona, un material que se hace muy agradable en el día a día.
Además de ajustarla al rostro con las tiras que vienen dentro de la caja (eliminando esa sensación de tirantez de las quirúrjicas), también ayuda a respirar.
Sus dimensiones son de 156 x 110 x 63 mm y pesa 126 gramos, bastante más ligera de lo que podría esperarse.
La mascarilla de LG elimina el 97,3% de los virus y el 93% de las bacterias a través de 2 filtros HEPA 13. Este tipo de filtro protege y filtra todas las partículas del COVID-19, lo que supone una apuesta segura por la salud.
Se enciende a través de un botón de color gris situado en la parte derecha de la mascarilla. Este tiene 3 velocidades (se accede a ellas pulsando una, 2 o 3 veces, en función de lo que desees):
Velocidad 1-baja: cuando estés sentado y relajado.
Velocidad 2-media: cuando hagas vida normal.
Velocidad 3-alta: cuando andes rápido o hagas deporte.
Cuenta con un sensor que detecta el ciclo y el volumen de la respiración y ajusta la velocidad de los ventiladores.
Los que la han probado dicen que utilizar la mascarilla de LG ofrece una sensación curiosa: sientes más aire cuando la utilizas, pero no de forma molesta. Eso sí, cuando mantienes una conversación con alguien, esta escucha perfectamente tu respiración y la voz que sale de la mascarilla se vuelve un poco menos natural y más mecánica, estilo Darth Vader.
En general se siente más cómoda que llevando una mascarilla normal por varias razones razones: no se siente calor, no se empañan las gafas, no deja marcas y no tira de las orejas.
Algunos preferirían que se eliminara la luz que aparece al activar la mascarilla, ya que resulta un elemento adicional para las miradas más curiosas en la noche.
La mascarilla cuenta con una batería de 820 mAh, que proporciona una autonomía de 8 horas máximo. Se carga de mediante USB Tipo C —que viene en la caja, pero no el cargador—, y tardará en llenarse de energía 2 horas.
Uno se pregunta si este tipo de mascarillas pueden servir también por ejemplo para el trabajo de los cirujanos, entre otras aplicaciones prácticas.
¿Será que llegarán pronto a República Dominicana?
Notas de las mejores agencias de noticias internacionales.
