El Día Nacional del Cine, convocado este sábado 8 de octubre, por Caribbean Cinemas y aceptada por Palacio del Cine, cadenas que han proclamado ofertas de boletas a un 50 %, (no incluye salas digitales especializadas) es una convocatoria privada….pero interesante.
La asistencia al cine, se ha restituido. La gente ha vuelto al cine y al parecer, la iniciativa es un reconocimiento o gratificación para incrementar la fidelidad, porque es un público que ha vuelto a pesar de la la disponibilidad cada vez más creciente de las plataformas de “streaming” y el efecto paralizador de la pandemia Covid 19.
Zumaya Cordero, directora de operaciones de CC, indica que el Día Nacional del Cine Dominicano se ha impulsado desde la esfera privada, como un incentivo y una gratificación a los cinéfilos y las familias que han demostrado que la proyección en pantalla gigante es una opción favorita de entretenimiento y vía aprendizaje y disfrute cultural y artístico.
Es como un Viernes Negro, pero en pequeña escala y con mayor control de las rebajas. Este día tiene su raíz en la declaración en ese sentido de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas = sugiriendo el Día Mundial del Cine, para que los cinéfilos de todo el mundo celebren sus películas favoritas y fomentar un vínculo cercano con los miembros de la Academia y los cineastas, a través de las redes sociales.
La primera celebración de esta efeméride se llevó a cabo antes de la 92ª entrega de los Oscar, en el año 2020 y se celebró por primera vez el 15 de febrero de 2020, con el objetivo de homenajear el poder que tienen las películas para inspirar y conectar a las personas en todo el mundo.
Este Día Nacional del Cine no es una declaración oficial institucional y en cambio es una acción proactiva de mercadeo que busca recompensar la gente que ha devuelto al cine su perfil de entretenimiento favorito de familias y personas, seducidas por la sensación que únicamente el cine produce, de vivir otras vidas, de ejercer el derecho a ver otros mundos y situaciones de ficción, del gusto por la aventura, la ilusión, la inclinación por las verdades detalladas que ofrecen artísticamente los documentales. Las estadísticas económicas que arroja.
El cliente dominicano acepta en buena medida, el cine. En 2018, La República Dominicana se convirtió en el líder en Latinoamérica, en cuota del mercado del cine propio con un 21%, superando a países como Brasil, Argentina, Chile y Perú. De la misma manera, es el líder en Iberoamérica con un 26.4%, dice el Reporte Audiovisual de ese año de la Entidad de Gestión Colectiva de Derechos de los Productores Audiovisuales (EGEDA).
Si una dimensión artística e industrial ha experimentado profundos cambios, representando una actividad que ha sido espacio, en su etapa de arranque real (desde 1995 con Un Pasaje de Ida (Agliberto Meléndez) para producciones malas, regulares y buenas, la creación de la Dirección General de Cine, el 13 de junio de 2011, sustituyendo a la Dirección Nacional de Cine (DINAC); el gran cisma: la Ley Nacional de Cine 108-10 y sus expresiones industriales, de autor, de arte, de variados géneros, de la diversificación en esos géneros, de las películas que generaron estereotipos y de las que van demostrando como se configura el potencial de la marca cinematográfica dominicana.
La Cuenta Satélite de Cultura del Banco Central y el Ministerio de Cultura (2016) y ahora reactivada para obtener información actual, revela la preferencia del público dominicano por la asistencia al cine, y su opción por las películas nacionales.
Los precedentes
Primera película técnicamente realizada : El cine dominicano propiamente nace con el estreno de Un pasaje de ida (Agliberto Meléndez), -, no “Pasaje de ida” como se repite tantas veces, con la que se establece el precedente de la primera película técnicamente cualificada como tal, producida en base a los criterios profesionales de la industria y que fue estrenada el jueves 18 de febrero de 1988, quien para hacerla hipotecó su carro (Peugeot) y su casa (un apartamento del sector de Naco, en Santo Domingo. Fue el disparo de salida del cine
Primera película comercial: New York: ¡Por Fin Llegó Balbuena! (1995, Ángel Muniz), que fue protagonizada por el comediante Luisito Martí. Su director creó un modelo de comercialización y mercadeo que sigue influyendo aún hoy. El estreno se produjo en Palacio del Cine, a partir de una plataforma de mercadeo caracterizada por la creatividad. Dos años más tarde, Muniz dirige Nueba Yol 3: bajo la nueva ley (1997) y ese mismo año Pericles Mejía produjo Cuatro hombres y un ataúd (1997) una comedia que pudo haber tenido una mayor incidencia, pero la falta de promoción y mercadeo, entre otros factores, limitaron su espacio. Para entonces, no había Ley Nacional de Cine.
Documental adelantado a su época: “Camino al Pico Duarte” (1982 Claudio Chea), supuso un encuentro y alerta contra la deforestación, mezclando la fotografía del paisaje, el discurso científico y el testimonio campesino, adelantando que, en materia de cine, el país tenía talentos con sentido responsable del quehacer fílmico.
Primer Taquillazo inesperado. Andrea (2005, Roger Bencosme), realizada como una película de suspenso y misterio, resultó tomada por el público como comedia de terror y con una excelente comercialización por parte de Palacio del Çine. Su director murió hace unos meses.
Primera comedia que inicia el interés industrial por el género: Sanky Panky (2007, José Enrique Pintor), protagonizada por Fausto Mata, con un excelente criterio de realización. Tuvo muy buena aceptación y despertó el interés de otros cineastas y productores por acudir a la comedia como género comercial.
Fortunato: emprendedor que populariza el documental. René Fortunato, con su primer proyecto de documental histórico La trinchera de honor (1988) estrenado en los cines Triple, Cine Doble, Cine Bolívar y Palacio del Cine, se adelantó tecnológico a su tiempo: adoptó el video tape como base tanto para el rodaje como para la proyección en sala, que hasta ese momento, era solo reservada para el formato celuloide de 35 ms. venciendo la resistencia de los cines y además estableciendo en el gusto de la gente, el deleite del documental, cuando la tendencia era la de preferir el cine de evasión de origen norteamericano. Hizo La trinchera de honor sacando tiempo libre de su trabajo como productor de Santo Domingo Invita, el espacio televisivo creado por Negro Santos, quien le ofreció facilidades para el desarrollo de su rol de documentalista. El crea un modelo que continuará luego su saga “Trujillo: el poder del jefe”, con tres ediciones desde 1991-1996; “Balaguer: la herencia del tirano”, en 1998; “Balaguer: la violencia del poder”, 2003; “Abril: la trinchera del honor” (nueva versión) y “Bosch: presidente en la frontera imperial”.
Primer estudio de cine profesional: Lantica, (fundado como Pinewood, franquicia de los estudios ingleses) en Juan Dolio en 2013 en una época de mucho menos perspectiva de auge cinematográfico, con los estándares internacionales para este tipo de instalaciones, a partir de una inversión privada y que hoy día se ha convertido es el más importante y que acoge producciones internacionales y muchas de las nacionales, comerciales, de arte e independientes. Mucha gente pensó que como era una inversión de una familia super poderosa y notablemente empresarial, el estudio estaría destinado a ofrecer servicios a proyectos comerciales internacionales y hasta se le atribuía un rol político de derecha o francamente conservador, pero la práctica ha demostrado, al poner al frente del equipo a profesionales como Rafael Elías Muñoz Jr. quien ha servido para impulsar, entre otros lineamientos de producción, lo mejor del cine dominicano, incluso a aquel socialmente cuestionador.
Primer estudio de cine independiente: Quitasueño (Ángel Muñiz. y Miguel Ángel Muñiz.) Este estudio abrió sus 40 mil metros de terreno e instalaciones especializadas, para acoger numerosos proyectos de cine ofreciendo facilidades sobre todo a los cineastas jóvenes dominicanos. Posteriormente, la familia Muñiz. Inauguró Estudios Pulpo, de post producción, con tecnología de punta y que se ha convertido en un referente para la producción. Ángel Muniz es el cineasta de mayor capacidad de solidaridad para con sus colegas, ofreciéndoles respaldo de su estudio, abriendo posibilidades de reivindicación a algunos que tenían un prontuario de malas películas. Es un artista.
Primera película dominicana profesional hecha para difusión gratis por Youtube: Y a Dios que nos perdone (Ángel Muniz), creando un precedente histórico.
El estudio de cine independiente más reciente: La Casita de Producciones, fundado por Alan Nadal Piantini, con una propuesta de producciones dotadas novedad,
Primera película dominicana multi-historias: Motel con la producción de Alan Nadal Piantini, quien desde La Casita de Producciones. Motel es un proyecto que debe tener una oportunidad para ser visto y reconocido.
Documental histórico dominicano de mejor terminación y mayor inversión en producción: Santo Domingo, Primada de América (José Enrique Pintor)
Instituciones vinculadas a la industria: Dirección General de Cine (DGCINE) que ha desarrollado un papel fundamental desde sus inicios como “muchacho nuevo del barrio” cuando Don Ellis Pérez le tocó instalar nacional e internacionalmente el propósito fílmico dominicano tanto para productores nacionales como para producciones internacionales que nos tienen como destino de rodajes. Es una figura histórica del espectáculo, del turismo y de la industria.
Fue sucedido por Ivette Marichal que amplió la esfera de acción, multiplicó la llegada de productoras internacionales y mantuvo en respaldo a la industria local, logrando notables éxitos entre los cuales destacan los Congresos nacionales de cine.
La tercera directora DGCINE Marianna Vargas Gurilieva, trazando una línea coherente de promover y regular las facilidades que establece la Ley Nacional de Cine, promulgada por el gobierno de Leonel Fernández. La labor de DGCINE. Vargas Gurilieva es una profesional de alta cualificación académica con trayectoria especializada corporativa.
Asociación de Profesionales del Cine (ADOCINE), que representa a quienes hacen cine y monta el Premio La Silla;
Asociación Dominicana de Actores de Cine (ADAC)
Asociación Dominicana de Prensa y Crítica Cinematográfica (ADOPRESCI), entidad profesional que desarrolla su premio de la crítica de cine (con tres ediciones) y que ha considerado a Cocote (2020, Nelson Carlo de los Santos) como la mejor película dominicana de todos los tiempos.
Festivales y muestras de cine:
Festival Global de Cine Santo Domingo, dirigido por Omar de la Cruz, de la Fundación Global Economía y Desarrollo,
Festival Internacional de Cine Fine Arts. (de Caribbean Cinemas).
Festival Internacional de Cine Fine Arts y Festival de Cine Hecho en Casa, ambos montados por Caribbean Cinemas).
Muestra de Cine Todo Cine. Todo Dominicana creado por la Embajada Dominicana ante el Reino de España, en el marco del Mes de la Dominicanidad, a propuesta del entonces consejero cultural Víctor Ramírez, actor, coreógrafo, bailaran y gestor cultural, que inició en pequeño y que se ha fortalecido en número de películas y calidad.
Festival de Cine Dominicano en NY, fundado en 2012 por Armando Guareño, bajo el lema Contando Nuestras Propias Historias, el DFFNYC. Guareño, es un gestor del cine dominicano que ha persistido en fortalecer el evento.
Hay festivales parciales o especializados como el de Cine LGTBI y el Festival Libélula de Cortos.
Hay eventos académicos bien establecidos, como la Semana más corta, de la Escuela de Comunicación de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra y el Festival de Cine Medioambiental Dominicano.
Hay festivales parciales o especializados como el de Cine LGTBI y el Festival Libélula de Cortos.
Hay eventos académicos bien establecidos, como la Semana más corta, de la Escuela de Comunicación de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra y el Festival de Cine Medioambiental Dominicano.
Festivales desaparecidos:
Festival Internacional de Cine de Santo Domingo, fundado en 1999, por Silvano Lora y Arturo Rodríguez, creado desde la Escuela de Cine de la UASD.
Muestra Internacional de cine de Santo Domingo. Inició en 1999, Arturo Rodríguez a la cabeza, y Carlos Francisco Elías, Luis Jiménez, Félix M. Lora, Lidia Bastos, Sócrates Mckinney y Humberto Almonte.
RedDoc, especializado en documentales.
Festival Mujeres en Cortos. Se presentaba en Cinemateca Dominicana. Ojalá lo relancen.
Festival de Mujeres Cineastas, montado por Unidad de Género de INTEC.
José Rafael Sosa periodista dominicano, editor, gestor cultural y escritor de literatura de soporte existencial y emocional a la gente , origami y comunicación masiva.