SD. Veneno, Primera Caída: El Relámpago de Jack, resultó, tal y como estaba previsto, la gran ganadora de los V Premios La Silla, de la Asociación Dominicana de Cineastas, en la gala celebrada el martes en la noche en Casa San Pablo.
La película, primera parte de una saga anunciada sobre la vida del super héroe dominicano, tenía 17 nominaciones, dejando poco margen a las demás, cumpliendo una tendencia de que cada año haya una película dominante. Algo parecido a lo que ha ocurrido en los Goya y que me luce absolutamente descabellado, toda vez que la industria y los esfuerzos de todo un año no lo hace un solo equipo con una sola película.
Sobre todo cuando en el 2017 se lograron 27 premios internacionales con otras películas que no fueron Veneno.
Algo no funciona bien. O hay que cambiar las leyes de la votación para que el premio sea creíble. O transparentar cuáles son los principios de votación en los premios La Silla.
Cuando Basanta comenzó al frente de Adocine le expuse este mismo punto de vista. Porque si nos basamos en la calidad -se supone que esos sean los parámetros a tomar en cuenta- los premios deberían ser más equilibrados. Y no recaer casi todos en una sola obra. Incluso le sugerí que podía establecer que las nominaciones las hicieran los miembros de Adocine, y los premios fueran otorgados por jurados donde hubiese invitados de otros países que valoren junto a otros dominicanos, miembros de la crítica y de la industria, cuál era el mejor filme en cada acápite.
Es cierto que Veneno, Cocote y Carpinteros fueron del 2017, como lo fueron Misión estrella o Luis, El hombre que cuida, Colao, Melocotones, Patricia, Mañana no te olvides, el documental Noelí en los países, Hay un país en el mundo, El sitio de los sitios, Catastrópico y Sambá, entre otras.
Creo que igualmente, se necesitó una gala que dignificara a esos premios, porque tal y como fueron entregados podían haberse dado a conocer por Internet. La industria del cine tiene capacidad para lograr mejores sedes y mejores producciones con la participación de los mismos artistas que participaron en algunas películas. Y conseguir respaldos de patrocinadores. El colmo es que los premios Iris, se vean mejores que los de Adocine.
La importancia de los premios
Los premios La Silla son importantes, son necesarios, y si los propios miembros de Adocine no le dan la importancia que merecen, se hacen flaco favor a sí mismos. La industria del cine la conforman no solo las empresas, sino también los productores, los directores, guionistas, diseñadores de producción, directores de fotografía, musicalizados, actores, maquillistas, vestuaristas, gafers, asistentes, choferes, etc. Incluyendo los directivos de DG Cine, los abogados, los contables, economistas, etc. Y también los críticos, que acompañan las película, las estudian como un hecho artístico y las analizan y las colocan en el lugar que deben estar dentro del arte que se hace en el país.
Este año varios en las redes alzaron sus voces porque no podían votar. Otros trataron de hacerlo pero ya era tarde. necesitamos unos premios La Silla robustos, creíbles, equilibrados, que reflejen lo que sucede en el cine dominicano.
Veneno no es mejor película que Cocote. Taba Blanchard no dirigió mejor Veneno, que Nelson de Los Santos Cocote. Si algún problema tiene Veneno es justamente el guión, cuyo premio pudo ir a Reinbou o El hombre que cuida, por poner dos ejemplos.
Mejor actor principal pudo ser Héctor Aníbal o Manny Pérez como Veneno o Vicente Santos. A mí al menos me convenció más, y lo dije en mi crítica en ese momento, la actuación de Ramón Candelario (quien debió ganar en solitario por Carpinteros como actor secundario), que la de Jean Jean en el protagónico en ese mismo filme. Pero ahí al menos las actuaciones estaban más o menos parejas.
Fue justo el premio de Judith Rodríguez por Cocote y Carpinteros. ¿Le dieron dos estatuillas? ¿O fue por una sola?
Si a la mirada de Sebastián Cabrera Chelin por Veneno, vamos, ¿por qué no pudo estar nominada al menos Misión estrella, con magnífica fotografía de Franklin Báez y Claudio Chea?
Estas y otras interrogantes nos asaltan, una vez más con los desaguisados de los premios que entrega Adocine.
Pronto daremos a conocer los premios que entregará la crítica.
Ojalá que el año que viene, con el nuevo ejecutivo de Adocine, los premios La Silla ganen en credibilidad y transparencia. Y que no todos los premios recaigan en una sola producción. Porque por ese camino, será mejor que el año que viene en La Silla compita una sola película.
Alfonso Quiñones (Cuba, 1959). Periodista, poeta, culturólogo, productor de cine y del programa de TV Confabulaciones. Productor y co-guionista del filme Dossier de ausencias (2020), productor, co-guionista y co-director de El Rey del Merengue (en producción, 2020).