SD. Los restos dentales de Adolf Hitler, en poder de los Servicios Federales de Seguridad de Rusia (la CIA rusa actual), son verdaderos, según han establecido científicos franceses que tras largas conversaciones pudieron tener acceso a los restos dentales del Führer.
Esta es la primera vez que alguien tiene la posibilidad de investigar científicamente dichos restos, y de manera independiente. Los resultados echan por tierra, de plano, las diferentes versiones de la teoría de la conspiración según las cuales, el líder nazi habría escapado y se habría establecido en diferentes partes del mundo.
El criminal más grande del mundo, creador del Holocausto (1933-1945), llevó adelante una política de exterminio de todo lo que no fuera la raza aria.
El European Journal of Internal Medicine da cuenta en un artículo firmado por los doctores Ph. Charlier -uno de los más reconocidos expertos mundiales en dientes-, R. Weil, P. Rainsard, J. Poupon y J. C. Brisard que: «El análisis biomédico de los presuntos restos de Adolf Hitler en Moscú, Rusia, ha sido una fantasía científica e histórica desde la muerte del dictador en Berlín el 30 de abril de 1945 (Apéndice 1). En este contexto, por primera vez desde 1946, los Servicios Secretos Rusos (FSB y GARF) nos dieron acceso completo a los restos para realizar un análisis científico independiente. En marzo y julio de 2017, se llevaron a cabo dos campañas de examen antropológico: investigación osteológica / morfológica directa y sub binocular, seguida de un muestreo mínimo para el examen SEM y análisis elementales (Apéndice 2)».
El periódico Gazeta.ru publica este domingo por su parte, un trabajo acerca del hecho, donde explica que los restos hallados en el sitio donde se suicidó Hitler, habían sido entregados por su jefe, el coronel Gorbushin, a la traductora Elena Rzhevskaya, quien participaba en los interrogatorios a los alemanes cautivos.
El encargo de cuidar los restos de Hitler fueron dados a la joven, por una simple razón: «Aquí no tenemos una caja fuerte, y como mujer es menos probable que te emborraches y los pierdas», le explicó el militar.
A fines de abril de 1945, las tropas soviéticas irrumpieron en Berlín y Hitler preparó su suicidio, probó el veneno en su propio perro Blondie, dictó las últimas órdenes y el testamento. Conocedor de que su amigo Mussolini había sido fusilado en Milán y colgado por los pies, planificó su suicidio junto a su compañera Eva Brown, el que llevó a efecto el 30 de abril, donde poco después fueron encontrados sus restos quemados, por las tropas rusas.
Los restos de Hitler fueron definitivamente destruidos en Alemania en 1970. Ahora solo quedan en Rusia los fragmentos quemados de la mandíbula y el hueso del cráneo con un agujero de bala. En 2000, los dientes se exhibieron como una exposición en la exposición dedicada al 55° aniversario del final de la Segunda Guerra Mundial.
La investigación realizada por el equipo liderado por Phillip Charlier, y que incluyó un estudio morfológico de los restos, un estudio con un microscopio electrónico y un análisis elemental, pone punto final a las especulaciones sobre la muerte del lider nazi, sobre todo por las pocas personas que estuvieron cerca de él en los últimos minutos. Así surgieron versiones de la teoría de la conspiración que lo daban como huido a la Antártida, o fallecido en Argentina en 1962, o en Paraguay en 1971 o en 1984 en Brasil. Hay versiones según las cuales, Francisco Franco le habría dado guarida en España. O que un experimentado piloto los había llevado a él y Eva Braun hasta Tander, en Dinamarca…
Los restos de Hitler
Según los registros médicos, en el momento de la muerte, el Führer tenía solo cuatro dientes propios, incisivos de la mandíbula inferior. El resto se presenta en forma de prótesis y coronas de metal. Estos dientes tienen rastros de periodontitis, señalan los autores del estudio. Además, los restos de fibras de carne no se encontraron en los dientes, lo que corresponde a la información conocida de que Hitler era vegetariano, dice en su informe Phillip Charlier.
A pesar de que a los investigadores franceses no se les permitió tomar muestras de tejido óseo de un fragmento del cráneo, establecieron su «total similitud» con las imágenes de rayos X tomadas por los médicos el año anterior a su muerte.
El equipo científico descubrió pequeños depósitos azules en la superficie metálica de la prótesis y en el esmalte de los dientes. Según los expertos, los mismos se habrían formado a partir de la exposición posterior a altas temperaturas y como resultado de la interacción del veneno con el metal.
«Los dientes son auténticos, no hay dudas al respecto. Esto prueba que Hitler no fue a Argentina en un submarino, se escondió en una base secreta en la Antártida o en el otro lado de la Luna»,
Los autores del trabajo sugieren en el futuro realizar un análisis de ADN para determinar con precisión la pertenencia de la mandíbula y el cráneo a una persona.
Alfonso Quiñones (Cuba, 1959). Periodista, poeta, culturólogo, productor de cine y del programa de TV Confabulaciones. Productor y co-guionista del filme Dossier de ausencias (2020), productor, co-guionista y co-director de El Rey del Merengue (en producción, 2020).