Una posible vacuna contra el coronavirus, desarrollada por la compañía farmacéutica Inovio, con el apoyo de la fundación de Bill y Melinda Gates, recibió el pasado lunes la aprobación formal para comenzar a ser probada en seres humanos, tal y como manda uno de los pasos inevitables. Es la segunda en llegar a esta fase de desarrollo, luego de que el laboratorio Moderna, en Massachusetts, enviara su primer lote a mediados de marzo.
Los expertos resaltan la velocidad con que se llegó a esta etapa, aunque aclaran que, si se confirmara que ambas vacunas son efectivas contra la enfermedad, no obstante tardarían entre un año y un año y medio en recibir aprobación formal para su aplicación al público.
La próxima etapa de prueba de la posible vacuna tendrá lugar dentro de las próximas semanas, luego de obtener resultados prometedores en animales. Será en una de dos instituciones: o en la Escuela de Medicina Perelman de Filadelfia, en el estado de Pennsylvania, o en el Centro de Investigación Farmacéutica, en Kansas City. La empresa espera que los resultados sobre las respuestas inmunes de los 40 voluntarios estén listos para el verano boreal.
Los procesos de esta naturaleza constan de cuatro etapas de exámenes en humanos. A medida que se avanza, los grupos de control son cada vez mayores, lo mismo que la información sobre la vacuna, su efectividad en condiciones naturales, posibles efectos adversos y la inmunidad a largo plazo que pueda generar.
La vacuna en cuestión, que es parte del grupo conocido como DNA, está compuesta de una estructura genética que, al ser insertada en un paciente, busca que sus células produzcan un anticuerpo específico que logre luchar contra una infección en particular. Las vacunas DNA han sido aprobadas para su uso en animales, pero aún no en humanos, se lee en una de las notas subidas en medios como Infobae.
Según datos de ese medio en específico, Inovio ya había llevado a cabo un proyecto similar: había completado un estudio en humanos para el potencial desarrollo de una vacuna contra el Síndrome Respiratorio de Medio Oriente (MERS, por sus siglas en inglés), un coronavirus similar a la pandemia actual que se esparció por la región que le da su nombre en 2012 y 2015, Infectando a más de 8.000 personas y causando la muerte de 774. Los sujetos en los cuales se experimentó habían producido anticuerpos que se mantuvieron activos durante un período de tiempo extendido. Con tal motivo, Inovio dijo en un informe que ha logrado aumentar su producción rápidamente, y que tendrá suficientes dosis tanto para la primera fase de exámenes en humanos como para la segunda.
Si las pruebas resultan fructíferas, producirían hasta un millón de dosis para fin de año. Ellas podrían usarse en más pruebas o como tratamiento de emergencia, si fueran aprobadas para ese uso.
Inovio es uno de los siete laboratorios seleccionados por los filántropos Gates para recibir financiamiento en sus esfuerzos para producir una vacuna.
Bill Gates explicó en un programa de televisión que, junto con estados y empresas, financiarán la construcción de fábricas para la producción de las siete vacunas en simultáneo aun sabiendo que terminarán «eligiendo dos, como mucho”. “Nuestra financiación temprana puede acelerar las cosas. Vamos a financiar la construcción de las siete para no perder tiempo diciendo ‘bueno, qué vacuna funciona’ antes de construir la fábrica”.
“Con la situación en la que estamos, en la que las economías pierden billones de dólares, y eso es mil veces más que mil millones, vale la pena desde un punto de vista económico”, expresó Bill Gates refiriéndose al dinero que se invertirá en fábricas cuyas vacunas no se terminarán usando.
Notas de las mejores agencias de noticias internacionales.