«¡Me voy a vengar!», dicen que dijo el que hasta ese momento había sido el director del Museo de Historia, cuando le fueron a pedir la llave de Cinemateca. «Me voy a vengar!», le decía al nuevo director de Museos y al nuevo viceministro de Cultura, enviados por la también flamante ministra. Allí también, sentada en una silla, vestida regiamente, esperando que el hombre se calmara, calladita y decente la directora general de Cine.
El hombre que acababa de ser cancelado de manera oficial de su puesto, se negaba a ir a entregar las llaves de la Cinemateca, por fin accedió a ir, y una vez allí comenzó a imprecar a los nuevos funcionarios. Aún así tampoco entregaba las llaves, que estaban encerradas en uno de los locales del museo, hasta que una copia de una llave en manos de alguien abrió la dichosa puerta y se encontraron finalmente las llaves con el letrero de Cinemateca.
Como lo lee, la Cinemateca Dominicana estuvo a punto de quedarse sin edificación. Esta institución cultural, junto al Teatro Nacional fueron las únicas que funcionaron ininterrumpidamente, mientras la Biblioteca estuvo ocho años cerrada (aun hoy siguen realizando arreglos, cuentan que en el sótano de la Biblioteca Nacional se han echado a perder varias obras pertenecientes al Museo de Arte Moderno (MAM), algo que debe aclararse), y los museos más de diez años. Incluso durante la pandemia, la Cinemateca ha estado organizando conferencias, talleres y simposios.
Desde el 5 de julio del 2017, cuando comenzó la remodelación de los museos, alguien comenzó a regar que la Cinemateca no iría más para ahí, que se quedaría sin edificación.
Pues sí, esta institución cultural iba a quedarse en la calle y sin llavín, literalmente, hasta este martes 1 de septiembre, en que tuvo que ser rescatada por las nuevas autoridades de Cultura.
El exceso de celo del anterior director del Museo de Historia, le hizo creerse que era el dueño de aquella edificación y que podía disponer y cerrar la institución cinematográfica.
Los nuevos inquilinos del edificio de la Ave. George Washington con Vicini Burgos -el Ministerio de Cultura- devolvieron la dignidad a la Cinemateca.
Urgía devolver esa parte de la edificación a la Dirección General de Cine, porque muchos y muy valiosos archivos fílmicos, depositados en las especiales bóvedas de la Cinemateca, estaban a punto de perderse, algunos de los cuales deben haberse arruinado. Una catástrofe por la cual alguien tendrá que responder.
Cuentan que la Dirección General de Cine y la Dirección General de Museos ya están coordinando acciones conjuntas en beneficio, finalmente, del ciudadano dominicano.
El cambio en Cultura está funcionando ya. ¡Es en serio que va el asunto!
La Cinemateca está salvada.
Alfonso Quiñones (Cuba, 1959). Periodista, poeta, culturólogo, productor de cine y del programa de TV Confabulaciones. Productor y co-guionista del filme Dossier de ausencias (2020), productor, co-guionista y co-director de El Rey del Merengue (en producción, 2020).