SD. Un informe del pasado 27 de marzo del Centro de Observación Polar y Modelización, de la Universidad de Leeds, fundada en 1904 en West Yorkshire, Inglaterra, dio a conocer que la gran capa de hielo de la Antártida está perdiendo terreno al ser erosionada por el agua cálida del océano que circula debajo de su borde de flotación.
La investigación ha producido el primer mapa completo de cómo el borde submarino de la capa de hielo o ¨línea de tierra¨ está cambiando. La mayoría de los glaciares antárticos fluyen directamente hacia el océano en profundas depresiones submarinas, y la llamada ¨línea de tierra¨ donde su base abandona el lecho marino y comienza a flotar.
El estudio que fue publicado en Nature Geoscience muestra que el océano austral ha fundido ya 1,463 km2 de hielo subacuático antártico, entre 2010 y 2016, un área del tamaño del Gran Londres.
El equipo, dirigido por el Dr. Hannes Konrad descubrió que la retirada de la ¨línea de tierra¨ ha sido extrema en ocho de los 65 glaciares más grandes de la capa de hielo. Y que el ritmo de desglaciación desde la última edad de hielo es aproximadamente de 25 metros al año. Así mismo, significaron que el retroceso de la ¨línea de tierra¨ en esos lares es más de cinco veces esa taza.
La investigación arrojó que los mayores cambios se han observado en la Antártida Occidental, donde más de un quinto de la capa de hielo se ha retirado a través del lecho marino, más rápido que el ritmo de la desglaciación.
El Dr. Konrad expresó: «Nuestro estudio proporciona una clara evidencia de que la retirada está ocurriendo a través de la capa de hielo debido a la fusión del océano en su base, y no solo en los pocos lugares que se han mapeado hasta ahora. Este retiro ha tenido un gran impacto en los glaciares del interior, ya que al liberarlos del lecho marino se elimina la fricción, lo que hace que se aceleren y contribuyan al aumento global del nivel del mar «.
Los investigadores también encontraron un comportamiento inesperado. Aunque el retroceso de la línea de tierra del glaciar Thwaites en la Antártida Occidental se ha acelerado, en el Glaciar Pine Island vecino -hasta hace poco tiempo uno de los más rápidos en retirada en el continente- se ha detenido. Esto sugiere que el océano que se derrite en su base puede haberse detenido.
Acerca de esto El Dr. Konrad agregó: «Estas diferencias enfatizan la naturaleza compleja de la inestabilidad de las capas de hielo en todo el continente, y ser capaces de detectarlas nos ayuda a identificar las áreas que merecen una mayor investigación».
Las líneas de tierra generalmente se encuentran a un kilómetro o más por debajo del nivel del mar y son inaccesibles incluso para los sumergibles, por lo que los métodos de detección remota son extremadamente valiosos.
El equipo pudo rastrear el movimiento de la línea de tierra de la Antártida utilizando el satélite CryoSat-2 de la Agencia Espacial Europea en 16,000 km de costa. Aunque CryoSat-2 está diseñado para medir cambios en la elevación de la capa de hielo, estos pueden traducirse en movimiento horizontal en la ¨línea de tierra¨ utilizando el conocimiento de la geometría del glaciar y del fondo marino y el principio de flotabilidad de Arquímedes, que relaciona el espesor del hielo flotante con la altura de su superficie.
El coautor del estudio, el profesor Andy Shepherd, dijo que están encantados ¨de lo bien que CryoSat-2 es capaz de detectar el movimiento de las líneas de tierra de la Antártida. Son lugares imposibles de acceder desde abajo, y generalmente invisibles en el suelo, por lo que es una ilustración fantástica del valor de las mediciones satelitales para identificar y comprender el cambio ambiental «.
Alfonso Quiñones (Cuba, 1959). Periodista, poeta, culturólogo, productor de cine y del programa de TV Confabulaciones. Productor y co-guionista del filme Dossier de ausencias (2020), productor, co-guionista y co-director de El Rey del Merengue (en producción, 2020).